PALABRAS DEL PAPA FRANCISCO

 

PALABRAS DELPAPA FRANCISCO
Papa Francisco




Hoy 16 de julio


Nadie puede servir a dos señores... No se puede servir a Dios y a las riquezas (Mt 6,24-34) La parábola del sembrador de Evangelio de hoy (Mt 13) nos ayuda a comprenderlo. La semilla que cayó en terreno espinoso fue ahogada. Pero, ¿quién la ahogó? Jesús dice "las riquezas y las preocupaciones mundanas". Vemos que Jesús tenía las ideas claras al respecto. Por tanto, las riquezas y las preocupaciones mundanas ahogan la palabra de Dios, le impiden crecer y la palabra muere ahogada porque no se la cuida... ¿Qué nos hacen estas riquezas y preocupaciones? Simplemente, nos cortan el tiempo... Pedid al Señor la gracia de no equivocarnos dando importancia a las preocupaciones y a la idolatría de las riquezas, sino de recordar siempre que tenemos un Padre que nos eligió y nos prometió algo bueno; por tanto, debemos caminar hacia esa promesa, tomando el presente como viene.



Hoy 15 de julio


Jesús invita a sus discípulos: a no tener miedo, a ser fuertes y confiados ante los desafíos de la vida, mientras les advierte de las adversidades que les esperan. El pasaje del Evangelio de hoy forma parte del discurso misionero, con el que el Maestro prepara a los Apóstoles para su primera experiencia de anuncio del Reino de Dios. Jesús les exhorta insistentemente a "no tener miedo", "no temáis"... Que María Santísima, modelo de confianza y abandono en Dios en la hora de la adversidad y del peligro, nos ayude a no abandonarnos nunca a la desesperación, sino a confiarnos siempre a Él y a su gracia, pues la gracia de Dios es siempre más poderosa que el mal.



Hoy 14 de julio


Jesús dice: "Yo los envío como a ovejas en medio de lobos". ¿Qué significa? El verdadero predicador es el que sabe que es débil, que sabe que no puede defenderse de sí mismo. El enviado en medio de los lobos podría objetar: "¿Pero, Señor, para que me coman?". La respuesta es: "¡Tú ve! Este es el camino".

El Doctor de la Iglesia, San Juan Crisóstomo, dijo en una oportunidad: "Pero si tú no vas como cordero, si vas como lobo entre los lobos, el Señor no te protege: defiéndete solo"... Cuando el que debe llevar la Palabra de Dios lo hace seguro de sí mismo y no como un cordero, termina mal. Si, en cambio, lo hace como un cordero, será el Señor el que defienda a los corderos. Los lobos no podrán. Quizá te quitarán la vida, pero tu corazón permanecerá fiel al Señor.




Hoy 13 de julio


A partir del Evangelio, podemos observar que la predicación evangélica nace de la gratuidad, del estupor, de la salvación que llega; y eso que he recibido gratuitamente, debo darlo gratuitamente. Esto se ve cuando Jesús envía a sus apóstoles y les da las instrucciones para la misión que les espera. Son indicaciones muy sencillas: "no os procuréis oro, ni plata, ni dinero"... La frase clave de las consignas de Cristo a sus discípulos es precisamente: "lo que han recibido gratis, den también gratuitamente": palabras en las que se comprende toda la gratuidad de la salvación. Porque no podemos predicar, anunciar el Reino de Dios, sin esta certeza interior de que todo es gratuito, todo es gracia. 



Hoy 12 de julio


Los doce apóstoles recibieron la gracia de encontrarse físicamente con Él en Jesucristo, el Hijo de Dios encarnado. Jesús, como hemos oído, llamó a cada uno de ellos por su nombre. Los miró a los ojos y ellos, a su vez, contemplaron su rostro, escucharon su voz y contemplaron sus milagros. El encuentro personal con el Señor, tiempo de gracia y de salvación, conlleva una misión: "Anunciad la Buena Nueva: El Reino de los Cielos está cerca" (v. 7). Encuentro y misión no deben separarse... Este tipo de encuentro personal con Jesucristo es posible también para nosotros, que somos los discípulos del tercer milenio. En nuestro esfuerzo por buscar el rostro del Señor, podemos reconocerlo en el rostro de los pobres, los enfermos, los abandonados y los extranjeros que Dios pone en nuestro camino.



Hoy 11 de julio


Este episodio contiene una advertencia que nos sirve a todos. De hecho, puede suceder que una envidia fuerte por la bondad y por las buenas obras de una persona pueda empujar a acusarlo falsamente. Y aquí hay un verdadero veneno mortal: la malicia con la que, de un modo premeditado, se quiere destruir la buena reputación del otro. ¡Que Dios nos libre de esta terrible tentación! Y si al examinar nuestra conciencia, nos damos cuenta de que esta hierba maligna está brotando dentro de nosotros, vayamos inmediatamente a confesarlo en el sacramento de la penitencia, antes de que se desarrolle y produzca sus efectos perversos, que son incurables. Estad atentos, porque este comportamiento destruye las familias, las amistades, las comunidades e incluso la sociedad...




Hoy 10 de julio



El Evangelista narra un milagro acerca de un cierto Jairo, uno de los jefes de la Sinagoga... Y dentro de este relato se incluye otro milagro: la curación de una mujer que sufría de hemorragias y se cura en cuanto toca el manto de Jesús. Aquí impresiona el hecho de que la fe de esta mujer atrae (a mí me entran ganas de decir "roba") el poder divino de salvación que hay en Cristo, el que, sintiendo que una fuerza había salido de Él, intenta entender qué ha pasado. Y cuando la mujer, con mucha vergüenza, se acercó y confesó todo, Él le dice: "Hija, tu fe te ha salvado"... Se trata de dos relatos entrelazados, con un único centro: la fe, y muestran a Jesús como fuente de vida, como Aquel que vuelve a dar la vida a quien confía plenamente en Él... Y para tener acceso a su corazón, al corazón de Jesús hay un solo requisito: sentirse necesitado de curación y confiarse a Él.


Hoy 9 de julio


Así como el Padre tiene predilección por los "pequeños", Jesús se dirige también a los "fatigados y agobiados". En efecto, Él se coloca entre ellos, porque es "manso y humilde de corazón", así se describe a sí mismo. Es lo mismo que en la primera y tercera Bienaventuranza, la de los humildes y pobres de espíritu, y la de los mansos... Jesús dice que si vamos a Él, encontraremos alivio... El "alivio" que Cristo ofrece a los cansados y oprimidos no es un mero consuelo psicológico o una limosna fastuosa, sino la alegría de los pobres evangelizados y constructores de la nueva humanidad: esto es, el consuelo. La alegría. La alegría que nos da Jesús. Es única. Es la alegría que Él mismo tiene.




Hoy 8 de julio


En el Evangelio de hoy, vemos que Jesús dice: "El vino nuevo debe echarse en odres nuevos". Por lo tanto, "a vino nuevo, odres nuevos". Aquí está la novedad del Evangelio. Por lo demás, ¿qué nos trae el Evangelio? Alegría y novedad... A la pregunta de los fariseos y escribas, Jesús responde: "No podemos ayunar como ustedes mientras estamos de fiesta. Días vendrán en que les será arrebatado el esposo". Y al decir esto, pensaba en su Pasión, pensaba en el tiempo de la pasión de tantos cristianos, incluso de nuestras pasiones, en las que estará la cruz.

Así pues, está claro que el Evangelio es novedad, el Evangelio es fiesta. Y solamente se puede vivir plenamente el Evangelio en un corazón gozoso y en un corazón renovado...



Hoy 7 de julio


Todo comienza con Jesús, que, dice el texto, "ve a un hombre"... Esta mirada de Jesús es realmente hermosa. Ver al otro, sea quien sea, como destinatario del amor, es el comienzo de la pasión evangelizadora. Todo parte de esta mirada, que aprendemos de Jesú.. Podemos preguntarnos: ¿cómo miramos a los demás? ¡Cuántas veces vemos sus defectos y no sus necesidades; cuántas veces etiquetamos a las personas según lo que hacen o lo que piensan! Incluso como cristianos nos decimos: ¿es de los nuestros o no? Esta no es la mirada de Jesús: Él mira siempre a cada persona con misericordia y, más aún, con predilección. Y los cristianos estamos llamados a hacer como Cristo, mirando como Él, especialmente a los llamados "alejados".



Hoy 6 de julio


El Evangelio dice: "viendo Jesús la fe de ellos, dice al paralítico: Hijo, tus pecados te son perdonados"... Y después, como signo visible, añade: "Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa"... ¡Qué maravilloso ejemplo de sanación! La acción de Cristo es una respuesta directa a la fe de esas personas, a la esperanza que depositan en Él, al amor que demuestran tener los unos por los otros. Y, por tanto, Jesús sana, pero no sana simplemente la parálisis, sana todo, perdona los pecados, renueva la vida del paralítico y de sus amigos. Hace nacer de nuevo, digamos así. Una sanación física y espiritual, todo junto, fruto de un encuentro personal y social... ¡El encuentro sanador con Jesús!



Hoy 5 de julio


En la lectura del Evangelio, comprobamos que el demonio existe. Existe sembrando el odio y la muerte en todo el mundo porque tiene envidia de que el Hijo de Dios se haya hecho hombre. Dios nos creó para la incorrupción, y nos hizo a su imagen y semejanza. Pero por la envidia del demonio, la muerte entró en el mundo.

(...) ¿Y por qué el diablo tiene envidia?" Tiene envidia de nuestra naturaleza humana. ¿Sabe por qué? Porque el Hijo de Dios se convirtió en uno de nosotros. El demonio no puede soportar eso. Por eso destruye, y eso es la raíz de la envidia del demonio, la raíz de nuestros males, nuestras tentaciones, es la raíz de las guerras, del hambre, de todas las calamidades del mundo...



Hoy 4 de julio


En el Evangelio, encontramos la escena cuando hay tormenta en el mar, las olas inundan la barca. "¡Sálvanos, Señor, que perecemos!", dicen los discípulos. El miedo es también una tentación del demonio: tener miedo de continuar en el camino del Señor. El miedo, sin embargo, no es un buen consejero. Jesús lo dijo muchas veces: "No tengáis miedo"... Cuando Jesús calma el mar, los discípulos de la barca se llenan de temor. Ante el pecado, la nostalgia, el miedo, debemos siempre "mirar al Señor" y "contemplar al Señor". Debemos decir: "Sálvanos, Señor, que perecemos". Sí, somos débiles, pero debemos ser valientes en nuestra debilidad



Hoy 3 de julio


Tomás metió sus dedos en las heridas del Señor. Pero no dijo: "es verdad, el Señor ha resucitado". Fue más allá; dijo: "Señor mío y Dios mío". Con esto entendemos lo que el Señor quería de Tomás. Partiendo de su incredulidad, le llevó a profesar no solo su creencia en la Resurrección, sino sobre todo, y fue el primero en hacerlo, su creencia en la divinidad del Señor... ¿Cómo puedo encontrar hoy las llagas de Jesús? No puedo verlas como las vio Tomás. Las encuentro haciendo obras de misericordia, dando al cuerpo, al cuerpo y al alma, pero subrayo el cuerpo, de vuestros hermanos heridos, porque están hambrientos, sedientos, desnudos, humillados, esclavos, en la cárcel, en el hospital. Estas son las llagas de Jesús en nuestros días; y Jesús nos pide que hagamos un acto de fe hacia Él a través de esas llagas.



Hoy 2 de julio


Jesús pide a sus discípulos que se tomen en serio las exigencias del Evangelio, incluso cuando eso requiere sacrificio y esfuerzo... Jesús dice a sus discípulos: "El que no toma su cruz y me sigue, no es digno de mí". Esto significa seguirle por el camino que Él mismo recorrió, sin buscar atajos. No hay amor verdadero sin cruz, es decir, sin un precio personal que pagar. Y son muchas las madres, muchos los padres que sacrifican muchas cosas por sus hijos, y soportan verdaderos sacrificios, cruces, pero porque los aman. Y cuando se lleva con Jesús, la cruz no da miedo, porque Él está siempre a nuestro lado para sostenernos en la hora de la prueba más difícil, para darnos fuerza y valor.




Hoy 1 de julio


Quizá el reconocimiento más conmovedor de la pobreza de nuestra oración salió de los labios del centurión romano que un día suplicó a Jesús que curara a su criado enfermo (cf. Mt 8,5-13). Se sentía totalmente inadecuado: no era judío, era un oficial del odiado ejército de ocupación. Pero su preocupación por su criado le anima, y le dice: "Señor, no soy digno de que entres en mi casa; basta que digas una palabra y mi sirviente quedará sano" (v. 8). Es la frase que repetimos también en cada liturgia eucarística... Dialogar con Dios es una gracia: no somos dignos de ella, no tenemos derechos que reclamar, "cojeamos" con cada palabra y cada pensamiento... Pero Jesús es la puerta que nos abre a este diálogo con Dios...



Hoy 30 de junio


En aquellos días, cuando Jesús bajó de la montaña, lo siguió una gran multitud. Entonces un leproso fue a postrarse ante él y le dijo: "Señor, si quieres, puedes limpiarme". Jesús extendió la mano y lo tocó, diciendo: "Lo quiero, queda limpio". Y al instante quedó limpio de su lepra. Jesús le dijo: "No se lo digas a nadie, pero ve a presentarte al sacerdote y entrega la ofrenda que ordenó Moisés para que les sirva de testimonio"



Hoy 29 de junio


Para el pescador Simón, llamado Pedro, era el comienzo de un camino: en efecto, tendría que pasar mucho tiempo antes de que el alcance de aquellas palabras entrara profundamente en su vida, envolviéndole por entero. Hay un "aprendizaje" de la fe, semejante al nuestro, que también afectó a los apóstoles Pedro y Pablo. Nosotros también creemos que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios vivo, pero hace falta tiempo, paciencia y mucha humildad para que nuestra forma de pensar y actuar se adhiera plenamente al Evangelio.

El camino de la fe nunca es un paseo por el parque, para nadie, ni para Pedro, ni para Pablo, ni para ningún cristiano. El camino de la fe no es un paseo por el parque, sino que es exigente, a veces arduo. Incluso Pablo, que se hizo cristiano, tuvo que aprender a ser cristiano de manera gradual, especialmente en tiempos de prueba.



Hoy 28 de junio


"¿Qué formas asumen los falsos profetas?" Son como encantadores de serpientes, o sea, se aprovechan de las emociones humanas para esclavizar a las personas y llevarlas adonde ellos quieren. Cuántos hijos de Dios se dejan fascinar por las lisonjas de un placer momentáneo, al que se le confunde con la felicidad. Cuántos hombres y mujeres viven como encantados por la ilusión del dinero, que los hace en realidad esclavos del lucro o de intereses mezquinos. Cuántos viven pensando que se bastan a sí mismos y caen presa de la soledad.

Otros falsos profetas son esos charlatanes que ofrecen soluciones sencillas e inmediatas para los sufrimientos, remedios que, sin embargo, resultan ser completamente inútiles... Cada uno de nosotros, por tanto, está llamado a discernir y a examinar en su corazón si se siente amenazado por las mentiras de estos falsos profetas.



Hoy 27 de junio


En el Evangelio de hoy, vemos que Jesús dice: "Entren por la puerta estrecha, porque es ancha la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y son muchos los que van por allí"... Con estas palabras, Jesús deja claro que no se trata de una cuestión de número, ¡no hay un número cerrado en el Paraíso! Si no que se trata de cruzar el paso correcto desde ahora, y este paso correcto es para todos, pero es estrecho. Este es el problema. Jesús no quiere engañarnos diciendo: "Sí, tranquilos, la cosa es fácil, hay una hermosa carretera y en el fondo una gran puerta". No nos dice esto: nos habla de la puerta estrecha. Nos dice las cosas como son: el paso es estrecho. ¿En qué sentido? En el sentido de que para salvarse uno debe amar a Dios y al prójimo, ¡y esto no es cómodo! Es una puerta estrecha porque es exigente, el amor es siempre exigente, requiere compromiso, más aún, esfuerzo, es decir, voluntad firme y perseverante de vivir según el Evangelio.



Hoy 26 de junio


Jesús te pide una mirada que no se quede en las apariencias, sino que llegue al corazón; que no juzgue, dejemos de juzgar a lo demás, Jesús nos pide una mirada que no juzgue sino que acoja. Abramos nuestro corazón para acoger a los demás. Porque solo el amor sana la vida, solo el amor sana la vida. Que la Virgen, Consuelo de los afligidos, nos ayude a llevar una caricia a los heridos, a los heridos en el corazón que encontremos en nuestro camino. Y a no juzgar, a no juzgar la realidad personal, social, de los demás. Dios ama a todos. No juzguéis, dejad vivir a los demás y tratad de acercaros con amor



Hoy 25 de junio

¡Cuántos cristianos son perseguidos aún hoy en todo el mundo! Sufren por el Evangelio con amor, son los mártires de nuestros días. Y podemos decir con certeza que son más que los mártires de los primeros tiempos: tantos mártires, por el mero hecho de ser cristianos... Jesús aconseja a estos discípulos de ayer y de hoy que sufren persecución "no temáis a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma" (v. 28). No hay que tener miedo de quienes pretenden apagar la fuerza evangelizadora con arrogancia y violencia. De hecho, no pueden hacer nada contra el alma, es decir, contra su unión con Dios: nadie puede arrebatársela a los discípulos, porque es un don de Dios...



Hoy 24 de junio

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días! Hoy la liturgia nos invita a celebrar la fiesta de la Natividad de san Juan Bautista. Su nacimiento es el evento que ilumina la vida de sus padres Isabel y Zacarías e implica en la alegría y en el asombro a los parientes y vecinos... Todo el evento del nacimiento de Juan Bautista está rodeado por un alegre sentido de asombro, de sorpresa, de gratitud. Asombro, sorpresa, gratitud... Preguntémonos cada uno de nosotros en un examen de conciencia: ¿cómo es mi fe?, ¿es alegre?, ¿está abierta a las sorpresas de Dios? Porque Dios es el Dios de las sorpresas.



Hoy 23 de junio


¿Cuál es mi tesoro?. Ciertamente, no pueden ser las riquezas, como ha dicho el Señor: "No acumuléis tesoros en la tierra, porque al final los perderéis". ¿Cuál es el tesoro que podemos llevarnos al final de la vida? Puedes llevarte lo que has dado, y solo eso. "Donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón". El Señor nos ha hecho buscarlo, encontrarlo y crecer. Pero si nuestro tesoro no está cerca del Señor, si no es del Señor, entonces nuestro corazón está inquieto... Recen para que el Señor cambie nuestros corazones, para que el Señor haga humanos esos pedazos de corazón que son de piedra, y les infunda una sana inquietud por seguir adelante.



Hoy 22 de junio


La misericordia de Dios tiene dos aspectos: es dar, ayudar, servir a los otros, y también perdonar, comprender. 

Dar y perdonar es intentar reproducir en nuestras vidas un pequeño reflejo de la perfección de Dios, que da y perdona sobreabundantemente... Es necesario pensar que todos nosotros somos un ejército de perdonados. Todos nosotros hemos sido mirados con compasión divina. Si nos acercamos sinceramente al Señor y afinamos el oído, posiblemente escucharemos algunas veces este reproche: "¿No debías tú también de tener compasión de tu compañero, como yo tuve compasión de ti?" (Mt 18,33).



Hoy 21 de junio


El Evangelio nos llama a ser protagonistas, abrazando tres remedios, tres medicinas que nos curan del pecado.

En primer lugar, está la oración, expresión de apertura y confianza en El Señor: es el encuentro personal con Él, que acorta las distancias creadas por el pecado. Orar significa decir: "No me basto a mí mismo, te necesito a Ti, Tú eres mi vida y mi salvación". En segundo lugar, está la caridad, para superar nuestra falta de implicación respecto a los demás. En tercer lugar, está el ayuno, la penitencia, para liberarnos de las dependencias respecto a lo que pasa, y entrenarnos para ser más sensibles y misericordiosos... Jesús nos llama a vivir la oración, la caridad y la penitencia con coherencia y autenticidad, superando la hipocresía...



Hoy 20 de junio


Jesús no quiere proponer un nuevo sistema de derecho civil, sino el mandamiento de amar al prójimo, que incluye también amar a los enemigos: "Amen a sus enemigos y rueguen por sus perseguidores". (v. 44) Y esto no es fácil. Estas palabras no deben entenderse como una aprobación del mal realizado por un enemigo, sino como una invitación a una perspectiva más elevada, una perspectiva magnánima, semejante a la del Padre celestial, que, dice Jesús, "hace salir su sol sobre malos y buenos, y hace llover sobre justos e injustos"... Enemigos son también aquellos que hablan mal de nosotros, que nos difaman y nos hacen daño. No es fácil digerir esto. Estamos llamados a responder a cada uno de ellos con el bien, que también tiene estrategias inspiradas en el amor...


Hoy 19 de junio


Jesús nos muestra el camino de la verdadera justicia a través de la ley del amor, que es superior a la ley del talión, "ojo por ojo y diente por diente". Esta antigua ley imponía a los malhechores un castigo equivalente al daño que causaban: la muerte para los que mataban, la amputación para los que herían, etc. Jesús no pide a sus discípulos que soporten el mal, sino que reaccionen; pero no con otra acción mala, sino con el bien. Solo así se rompe la cadena del mal: un mal lleva a otro que lleva a otro mal... Esta cadena del mal se rompe y las cosas empiezan a cambiar de verdad... El mal es, de hecho, un "vacío", un vacío de bien. No es posible llenar un vacío, salvo con "plenitud", es decir, con el bien.


Hoy 18 de junio


Al ver a las muchedumbres, Jesús se compadecía de ellas, porque estaban extenuadas y abandonadas como ovejas que no tienen pastor. Entonces dice a sus discípulos: "La mies es abundante, pero los trabajadores son pocos; rogad, pues, al Señor de la mies que mande trabajadores a su mies"... Evidentemente, el campo del cual habla Jesús es la humanidad, somos nosotros. Y la acción eficaz que es causa del "mucho fruto" es la gracia de Dios, la comunión con él. Por tanto, la oración que Jesús pide a la Iglesia se refiere a la petición de incrementar el número de quienes están al servicio de su Reino... Dispongamos nuestro corazón a ser terreno bueno para escuchar, acoger y vivir la Palabra y dar así fruto.


Hoy 17 de junio


María vivió como nadie las bienaventuranzas de Jesús. Ella es la que se estremecía de gozo en la presencia de Dios, la que conservaba todo en su corazón y se dejó atravesar por la espada. Es la santa entre los santos, la más bendita, la que nos enseña el camino de la santidad y nos acompaña. Ella no acepta que nos quedemos caídos y a veces nos lleva en sus brazos sin juzgarnos. Conversar con ella nos consuela, nos libera y nos santifica. La Madre no necesita de muchas palabras, no le hace falta que nos esforcemos demasiado para explicarle lo que nos pasa. Basta musitar una y otra vez: "Dios te salve, María".


Hoy 16 de junio


Jesús dice: "Aprended de mí que soy humilde y manso de corazón". El Señor era manso, no gritaba. No castigaba a la gente. Era manso. Siempre con mansedumbre. No es que no se enfadara: pensemos en lo que vio en el templo, la casa de su Padre se convierte en lugar de compras, para vender cosas, con los cambia-monedas y todo lo demás: ahí se enfadó, tomó el látigo y expulsó a todos. Pero porque amaba al Padre, porque era humilde delante del Padre, tenía esta fuerza. Y la gente aplaudía. Pero, fundamentalmente, Jesús se caracterizaba por la mansedumbre: esa humildad que no es agresiva, es mansa... Este era Jesús: humilde y manso de corazón, cercano a la gente, con capacidad de padecer, con compasión y con estos rasgos de mansedumbre y de ternura.


Hoy 15 de junio


Jesús dice que cuando empiezas a sentir algo negativo en tu corazón contra uno de tus hermanos y lo expresas con un insulto, una maldición o un arrebato de ira, algo va mal. Debes convertirte, debes cambiar... El Apóstol Santiago que dice que "los barcos se guían por un timón y las personas se guían por su lengua". Así que si alguien "es incapaz de controlar su lengua, está perdido". Esta es la debilidad del hombre. La agresión natural de Caín hacia su hermano se ha repetido a lo largo de la historia. No es que seamos malos; somos débiles y pecadores. Esto explica por qué es mucho más fácil resolver una situación con un insulto, con una calumnia, con echar barro, que con palabras amables, como dice Jesús.


Hoy 14 de junio


La Ley que Dios da a su pueblo. La Ley que El Señor quiso darnos y que Jesús quiso llevar a la máxima perfección. Pero hay algo que llama la atención: la forma en que Dios da la Ley... El Señor da la Ley a su pueblo con una actitud de cercanía. No son las prescripciones de un gobernante, que puede estar lejos, o de un dictador... no. Es la cercanía. Y sabemos por revelación que es la cercanía de un padre, como padre, que acompaña a su pueblo dándole el don de la Ley. El Dios cercano. En verdad, ¿qué gran nación tiene dioses tan cercanos a ella, como El Señor, nuestro Dios, está cerca de nosotros cada vez que lo llamamos?... Nuestro Dios es el Dios de la cercanía, un Dios que está cerca, que camina con su pueblo.


Hoy 13 de junio


Lo que Jesús quiere decir al pedirnos que seamos la luz del mundo: nosotros, que somos sus discípulos, estamos llamados a brillar como una ciudad asentada sobre una colina, como una lámpara cuya llama no puede apagarse nunca. En otras palabras, antes de preocuparnos por las tinieblas que nos rodean, antes de esperar que las sombras que nos rodean se aclaren, estamos llamados a irradiar luz, a dar brillo a nuestras ciudades, a nuestros pueblos y hogares, a nuestros conocidos y a todas nuestras actividades cotidianas con nuestra vida y nuestras buenas obras. El Señor nos dará la fuerza, la fuerza de ser luz en Él, para que todos vean nuestras buenas obras, y al verlas, como nos recuerda Jesús, se alegren en Dios y le den gloria...


Hoy 12 de junio


En la Liturgia de hoy se proclaman las bienaventuranzas... La primera es fundamental y dice así: "Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos"... ¿Quiénes son los "pobres de espíritu"? Son aquellos que saben que no se bastan consigo mismos, que no son autosuficientes, y viven como "mendicantes de Dios": se sienten necesitados de Dios y reconocen que el bien viene de Él, como don, como gracia. Quien es pobre de espíritu, atesora lo que recibe; por eso desea que ningún don se desperdicie... ¿Cómo vivo la pobreza de espíritu? ¿Sé hacer espacio a Dios, creo que Él es mi bien, mi verdadera y gran riqueza?


Hoy 11 de junio


Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días y feliz domingo! En Italia y en otros países hoy se celebra la solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo...

En el Cuerpo y en la Sangre de Cristo encontramos su presencia, su vida donada por cada uno de nosotros. No nos da solo la ayuda para ir adelante, sino que se da a sí mismo: se hace nuestro compañero de viaje, entra en nuestras historias, visita nuestras soledades, dando de nuevo sentido y entusiasmo. Esto nos sacia, cuando el Señor da sentido a nuestra vida, a nuestras oscuridades, a nuestras dudas, pero Él ve el sentido y este sentido que nos da el Señor nos sacia, esto nos da ese "algo más" que todos buscamos: ¡es decir, la presencia del Señor! Porque al calor de su presencia nuestra vida cambia.


Hoy 10 de jujio


 Los ricos han dado, con gran ostentación, lo que para ellos era superfluo, mientras que la viuda, con discreción y humildad, ha echado «todo lo que tenía para vivir» (v. 44); por ello —dice Jesús— ella ha dado más que todos. Debido a su extrema pobreza, hubiera podido ofrecer una sola moneda para el templo y quedarse con la otra. Pero ella no quiere ir a la mitad con Dios: se priva de todo. En su pobreza ha comprendido que, teniendo a Dios, lo tiene todo; se siente amada totalmente por Él y, a su vez, lo ama totalmente. ¡Qué bonito ejemplo esa viejecita!


Hoy 9 de junio


Escuchar a Jesús se convierte así en el camino para descubrir que Él nos conoce... Si lo escuchamos, descubrimos que el Señor nos ama... Jesús busca una cálida amistad, una confidencia, una intimidad. Quiere donarnos un conocimiento nuevo y maravilloso: el de sabernos siempre amados por Él y, por tanto, nunca dejados solos a nosotros mismos... Si estamos con el buen pastor viviremos la experiencia de la que habla el Salmo, que dice que él está con nosotros, aunque pasemos por un valle oscuro, por lo que ningún mal temeremos. Así será sobre todo en los sufrimientos, en las fatigas, en las crisis. Y así, precisamente en las situaciones difíciles, podemos descubrir ser conocidos y amados por el Señor.


Hoy 8 de junio


No se puede amar a Dios sin amar al prójimo y no se puede amar al prójimo sin amar a Dios. El Papa Benedicto XVI nos dejó un bellísimo comentario al respecto en su primera encíclica Deus caritas est, (nn. 16-18)... En efecto, el signo visible que el cristiano puede mostrar para testimoniar al mundo y a los demás, a su familia, el amor de Dios es el amor a los hermanos. El mandamiento del amor a Dios y al prójimo es el primero, no porque está en la cima de la lista de los mandamientos. Jesús no lo puso en el vértice, sino en el centro, porque es el corazón desde el cual todo debe partir y al cual todo debe regresar y hacer referencia.


Hoy 7 de junio


La página del Evangelio nos ofrece una enseñanza maravillosa de Jesús sobre la resurrección de los muertos... Jesús no cae en la trampa y responde que los resucitados en el más allá, ni ellos tomarán mujer, ni ellas marido, ni pueden ya morir, porque son como ángeles, y son hijos de Dios, siendo hijos de la resurrección... Con esta respuesta, Jesús invita, en primer lugar, a sus interlocutores (y a nosotros también) a pensar que esta dimensión terrenal en la que vivimos ahora no es la única dimensión, sino que hay otra, ya no sujeta a la muerte, en la que se manifestará plenamente que somos hijos de Dios... Jesús responde que la vida pertenece a Dios, que nos ama y se preocupa mucho por nosotros, hasta el punto de vincular su nombre al nuestro: es "el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob. Porque Él no es un Dios de muertos, sino de vivos..."...


Hoy 6 de junio


Jesús responde con calma y aprovecha la pregunta maliciosa para dar una enseñanza importante, elevándose por encima de la polémica y de las formaciones opuestas... Por un lado, al insinuar devolver al emperador lo que le pertenece, Jesús declara que pagar el impuesto no es un acto de idolatría, sino un acto debido a la autoridad terrenal; por el otro (y es aquí donde Jesús da el golpe maestro) reclamando el primado de Dios, pide que se le rinda lo que le espera como Señor de la vida del hombre y de la historia... El cristiano está llamado a comprometerse concretamente con las realidades humanas y sociales sin contraponer Dios y César... El cristiano está llamado a comprometerse concretamente en las realidades terrenales, pero iluminándolas con la luz que viene de Dios.


Hoy 5 de junio


Construir la unidad de la Iglesia, es la tarea de cada cristiano, de cada uno de nosotros. Y cuando se debe construir un templo, un edificio, se busca una zona edificable preparada para esto. Pero la primera cosa que se hace es buscar la piedra fundamental: la piedra angular, dice la Biblia. Y la piedra angular de la Iglesia es Jesús, mientras que la piedra angular de la unidad de la Iglesia es la oración de Jesús en la última cena: "Padre, que sean uno". Precisamente esta es la fuerza, es la piedra sobre la cual edificamos la unidad de la Iglesia. Sin esta piedra no se puede. No hay unidad sin Jesucristo en la base: es nuestra seguridad...


Hoy 4 de junio


El Evangelio nos vuelve a proponer las palabras que Jesús dirigió a Nicodemo: "Tanto amó Dios al mundo, que entregó a su Unigénito" (Jn 3,16). Al escuchar estas palabras, dirijamos la mirada de nuestro corazón a Jesús Crucificado y sintamos dentro de nosotros que Dio nos ama, nos ama de verdad, y nos ama en gran medida. Esta es la expresión más sencilla que resume todo el Evangelio, toda la fe, toda la teología: Dios nos ama con amor gratuito y sin medida... La Cruz de Cristo es la prueba suprema de la misericordia y del amor de Dios por nosotros: Jesús nos amó "hasta el extremo" (Jn 13, 1), es decir, no solo hasta el último instante de su vida terrena, sino hasta el límite extremo del amor.


Hoy 3 de junio


La autoridad no es: "yo mando, tú haces". No, es otra cosa, es un don, es una coherencia. Y Jesús recibió este don de la autoridad: dicen don, no sé si es justa la palabra, pero Él lo recibió. Así, cuando, al final del Evangelio de Mateo, se lee el envío de los apóstoles en misión por el mundo, Él dice: se me ha dado cada autoridad, sobre el cielo y la tierra. Yo soy un hombre de autoridad... ¿Pero qué hacían los escribas? Ellos enseñaban las cosas que habían aprendido: en la escuela rabínica, que era la Universidad de aquel tiempo, leyendo la Torá. Enseñaban la verdad. No enseñaban cosas malas: ¡absolutamente no! Enseñaban las cosas verdaderas de la ley: pero no llegaban a la gente porque ellos enseñaban precisamente desde la cátedra y no se interesaban por la gente. Porque lo que da autoridad (una de las cosas que da la autoridad) es la cercanía y Jesús tenía autoridad porque se acercaba a la gente.


Hoy 2 de junio

En efecto, en el templo se adora al Señor. Este es el punto más importante. Y esta verdad es válida para todo templo y para toda ceremonia litúrgica, donde lo que es más importante es la adoración y no los cantos y los ritos, por bellos que sean... Jesús purifica el templo. Pero lo hace con el látigo en la mano. Se pone a expulsar las actitudes paganas, en este caso de los mercaderes que vendían y habían transformado el templo en pequeños negocios para vender, para cambiar las monedas, las divisas. Jesús purifica el templo reprendiendo: "Está escrito: mi casa será casa de oración" y no de otra cosa. El templo es un lugar sagrado. Y nosotros debemos entrar allí, en la sacralidad que nos lleva a la adoración. No hay otra cosa.


Hoy 1 de junio

Muchos de los que estaban con Jesús ordenaron a Bartimeo que se callara (cf. v. 48). Para tales discípulos, una persona necesitada era una molestia en el camino, un obstáculo inesperado e imprevisto. Preferían su propio horario al del Maestro, su propia conversación a escuchar a los demás. Seguían a Jesús, pero tenían en mente sus propios planes. Este es un riesgo contra el que hay que precaverse constantemente. Sin embargo, para Jesús, el grito de los que suplican ayuda no es una molestia, sino un desafío. ¡Qué importante es para nosotros escuchar la vida!––


Hoy 31 de mayo


María tendría, sin dudas, una misión difícil, pero las dificultades no eran una razón para decir "no". Seguro que tendría complicaciones, pero no serían las mismas complicaciones que se producen cuando la cobardía nos paraliza por no tener todo claro o asegurado de antemano. ¡María no compró un seguro de vida! ¡María se la jugó y por eso es fuerte, por eso es una influencer, es la influencer de Dios! El "sí" y las ganas de servir fueron más fuertes que las dudas y las dificultades... María era la chica de alma grande que se estremecía de alegría (cf. Lc 1,47), era la jovencita con los ojos iluminados por el Espíritu Santo que contemplaba la vida con fe y guardaba todo en su corazón de muchacha (cf. Lc 2,19.51). Era la inquieta, la que se pone continuamente en camino, que cuando supo que su prima la necesitaba no pensó en sus propios proyectos, sino que salió hacia la montaña sin demora (Lc 1,39).


Hoy 30 de mayo


Jesús asegura a todos los que le siguen un lugar en la familia de los cristianos y recuerda que todos somos hermanos, pero advierte de que habrá persecuciones, dificultades. "Quien me siga, debe tomar el mismo camino que yo tomé". Es un camino que lleva a humillarse y que termina en la Cruz. Siempre habrá dificultades y persecuciones que vengan del mundo, porque él tomó este camino primero. Cuando un cristiano no tiene dificultades en la vida y todo va bien, algo no va bien. Se podría pensar que sucumbió a la tentación de seguir el espíritu del mundo en lugar de a Jesús. Pidamos esta gracia: seguir a Jesús por el camino que Él nos ha mostrado y enseñado. Esto es hermoso: Él nunca nos deja solos, nunca. Él está siempre con nosotros.


Hoy 29 de mayo

En los Evangelios, cada vez que se habla de María se habla de la madre de Jesús. Y aunque en la Anunciación no se dice la palabra "madre", el contexto es de maternidad: la madre de Jesús, esta actitud de madre acompaña su obra durante toda la vida de Jesús: es madre. Tanto que, al final, Jesús la da como madre a los suyos, en la persona de Juan: "Yo me voy, pero esta es vuestra madre". He ahí, por tanto, la maternidad de María... Las palabras de la Virgen son palabras de madre... María es madre desde el principio, desde el momento en el que aparece en los Evangelios, desde el momento de la Anunciación hasta el final, ella es madre. De ella no se dice "la señora" o "la viuda de José", y en realidad podían decirlo, sino que siempre María es madre.


Hoy 28 de mayo


Invoquémoslo hoy, bien apoyados en la oración, sin la cual toda acción corre el riesgo de quedarse vacía y el anuncio finalmente carece de alma. Jesús quiere evangelizadores que anuncien la Buena Noticia no solo con palabras, sino sobre todo con una vida que se ha transfigurado en la presencia de Dios.


Hoy 27 de mayo


La murmuración es destructiva para la Iglesia. Jesús habló a menudo de esto a Pedro y a todos los demás. Le preguntó varias veces a Pedro "si lo amaba, si lo amaba más que a los demás". Pedro dijo "sí", y El Señor le dio su papel: "apacienta mis ovejas". Fue una conversación real y amorosa. Sin embargo, en un determinado momento, Pedro tuvo la tentación de interferir en la vida de otra persona (cf. Jn 21,20-25). Pedro era un ser humano y, por tanto, no podía dejar de tener la tentación de inmiscuirse en la vida de los demás, como dice la expresión vulgar, de "meter las narices en asuntos ajenos". Esto sucede también en nuestra vida de cristianos. ¿Cuántas veces, estamos tentados de hacer esto?.


Hoy 26 de mayo


En el Evangelio, vemos que lo que se desarrolló entre Pedro y Jesús después de aquel primer "sígueme" fue un diálogo de amor. Desde el momento en que Jesús llamó a Simón con un nuevo nombre: "Cefa, Pedro", fue el inicio de una misión, aunque Pedro no entendiera nada, la misión estaba ahí. Y cuando Pedro recuerda más tarde cómo negó por la noche conocer a Jesús, "siente vergüenza". La vergüenza de Pedro... Pedro es un gran hombre. Un pecador. Pero El Señor se lo muestra, a él y a todos nosotros, todos somos pecadores. El problema no es pecar, sino no arrepentirse del pecado, no sentir vergüenza de lo que hemos hecho. Ese es el problema.


Hoy 25 de mayo

En diversos países resurgen enfrentamientos y viejas divisiones que se creían en parte superadas. A los cristianos de todas las comunidades del mundo, quiero pediros especialmente un testimonio de comunión fraterna que se vuelva atractivo y resplandeciente. Que todos puedan admirar cómo os cuidáis unos a otros, cómo os dais aliento mutuamente y cómo os acompañáis: "En esto reconocerán que sois mis discípulos, en el amor que os tengáis unos a otros". (Jn 13,35). Es lo que con tantos deseos pedía Jesús al Padre: "Que sean uno en nosotros... para que el mundo crea" (Jn 17,21). ¡Atención a la tentación de la envidia! ¡Estamos en la misma barca y vamos hacia el mismo puerto! Pidamos la gracia de alegrarnos con los frutos ajenos, que son de todos

Comentarios